Autores: Daniel Álvarez Mántaras, Pablo Luque Rodríguez y Juan Manuel González-Carbajal García
Editorial: THOMSON – Madrid 2005
ISBN: 84-9732-403-X
Este libro tiene singular importancia en la investigación de accidentes, en los que como es conocido, se trata de dar respuesta, mediante el informe técnico, a tres preguntas esenciales, que son “qué pasó”, “cómo pasó” y >”por qué pasó”. Es precisamente a la primera pregunta a la que se enfoca el contenido de este trabajo, ya que no tiene duda alguna que el análisis y las conclusiones de cualquier informe técnico de un accidente, será tan preciso cuanto lo haya sido la toma de datos. Cualquier omisión tendrá incidencia en lo que se concluya y, por ende, en las responsabilidades y derechos de las partes implicadas.
Aunque en este caso se incluye un capítulo de naturaleza jurídica, es de justicia reconocer que dada la volatilidad de las normas y la profusión y cambios legislativos, ha perdido precisión en cuando a su contenido, algo que no sucede con el resto del libro, dado su carácter técnico y empírico.
La obra se divide en los siguientes capítulos: cuestiones previas; la escena del accidente; el vehículo; las ruedas y la carretera; choque y deformaciones, junto con 3 anexos. En todo caso, esta obra es el resultado de la colaboración entre distintas disciplinas con la intención de ofrecer un trabajo en el que, junto al contenido mayoritariamente técnico, subyace también el derecho y la perspectiva jurídica de una fase esencial de cualquier investigación de accidentes de tráfico como es la toma de datos, en la actualidad el auténtico talón de Aquiles en la materia. Su contenido está pensado y estructurado para resultar útil tanto al técnico que deba elaborar un informe como al jurista que tenga que arbitrar los medios de prueba necesarios para defender los intereses de su cliente y, muy especialmente, para que pueda servir de ayuda a todos esos agentes de la autoridad que con la escasez de medios disponibles intentan hacer lo mejor que pueden su trabajo en cada uno de los miles de accidentes que se producen en nuestras carreteras.
Aunque en este caso se incluye un capítulo de naturaleza jurídica, es de justicia reconocer que dada la volatilidad de las normas y la profusión y cambios legislativos, ha perdido precisión en cuando a su contenido, algo que no sucede con el resto del libro, dado su carácter técnico y empírico.
La obra se divide en los siguientes capítulos: cuestiones previas; la escena del accidente; el vehículo; las ruedas y la carretera; choque y deformaciones, junto con 3 anexos. En todo caso, esta obra es el resultado de la colaboración entre distintas disciplinas con la intención de ofrecer un trabajo en el que, junto al contenido mayoritariamente técnico, subyace también el derecho y la perspectiva jurídica de una fase esencial de cualquier investigación de accidentes de tráfico como es la toma de datos, en la actualidad el auténtico talón de Aquiles en la materia. Su contenido está pensado y estructurado para resultar útil tanto al técnico que deba elaborar un informe como al jurista que tenga que arbitrar los medios de prueba necesarios para defender los intereses de su cliente y, muy especialmente, para que pueda servir de ayuda a todos esos agentes de la autoridad que con la escasez de medios disponibles intentan hacer lo mejor que pueden su trabajo en cada uno de los miles de accidentes que se producen en nuestras carreteras.